Tengo una boda!

A veces, a pesar de la alegría que supone que te inviten a una boda, se convierte en la peor de tus pesadillas ya que empiezan un sin fin de dudas que hay que solucionar. Que me pongo?, lo primero, echamos un vistazo a nuestro fondo de armario a ver si con suerte no coinciden los invitados y por tanto puedes repetir el modelito que llevaste a la anterior. Si no, no queda otra, comienza la búsqueda hasta dar con el look adecuado.

Hace unos meses se casó una amiga de esas que quedan pocas, por lo que su boda suponía para mi también un gran día. Quería ir sencilla pero a la vez sofisticada aunque, al ser de mañana implicaba una complicación adicional hasta que lo vi y supe, que era el vestido perfecto para la ocasión. En azul klein, tan de moda en esta temporada, creo que conseguí lo que pretendia, estar elegante pero siempre a la sombra de la novia, que estaba espectacular. El punto de sofisticación lo conseguí gracias a la espalda al aire y la tela aterciopelada. Los complementos en negro y el peinado sencillo, para que resaltara lo importante del look que era el vestido.

Sobra decir que fue una boda preciosa donde sólo hubo felicidad, felicidad y más felicidad.

Un gran beso para ti.

Vestido de Hoss intropía, medias Calcedonia, americana Berska, zapatos Mari Paz